Civilidad y educación: entre lo humano y lo social.

La ponencia la he estructurado en dos ejes de reflexión:1) la civilidad ciudadana como referente para lograr la participación social, y 2) la educación social y ciudadana como elementos clave de una nueva institucionalidad. El tema de la civilidad se posiciona hoy con fuerza en los principales debates en sociedades que experimentan una transición democrática o bien están en proceso de consolidación. La participación ciudadana ampliada y no circunscrita a los momentos electorales, es condición para fortalecer a una República democrática. Sin embargo, la ciudadanización de la política y de la vida civil, requiere de una clara concepción de civilidad. El trabajo aborda distintas maneras de entender dicha problemática. Hoy enfrentamos cambios sociales que van desde los retos que nos impone un país en transición democrática hasta aquellos que han marcado las nuevas reglas del juego en un ambiente globalizado y caracterizado por el imperio del conocimiento. En este contexto la educación para la ciudadanía se vuelve clave no solo para entender mejor el mundo en que vivimos sino para insertarnos en él con oportunidad y conseguir una mejora de la vida colectiva. La educación como práctica social transformadora está comprometida con la construcción de una sociedad más justa e igualitaria. Consideramos que es necesaria, para fortalecer la transición democrática en México, una política de educación social que impulse a nivel nacional, regional y local una mayor y mejor participación con un enfoque de ciudadanía dispuesta a crear y acordar en consenso un modelo de sociedad incluyente, crítica, propositiva y en beneficio de una mayor justicia social, que pase de un modelo de política social asistencialista a uno que promueva responsable y profesionalmente a la educación social como eje articulador de la participación ciudadana.

Credit: Arturo Ballesteros Leiner