XI Congreso Internacional de Salud, Bienestar y Sociedad

Resumen

El cannabis sativa ha sido utilizado desde hace mucho tiempo como analgésico gracias al efecto de su principio activo, el tetrahidrocanabinol (THC). Los cannabinoides más investigados y aprobados por la FDA son el delta 9 tetrahidrocannabinol (dronabinol), principal compuesto psicoactivo, y la nabilona (análogo sintético del THC). Como analgésico se han utilizado en trastornos neurodegenerativos, metabólicos, autoinmunes, glaucoma e incluso cáncer. Como antiemético en náusea y vómito causados por quimioterapia y como anticonvulsivante y analgésico en el dolor neuropático, espasticidad y rigidez de la esclerosis múltiple. Objetivo: Dar a conocer a la comunidad internacional los diferentes usos del cannabis en tratamientos médicos y la aceptación por parte de la farmacopea moderna. Metodología: Investigación documental, bibliográfica y analítica. El análisis se enfocó en la metodología, tipo de muestra, patologías, efectos adversos, resultados obtenidos, así como el sector donde se realiza. Resultados: En Chicago se utilizó con éxito en la apnea obstructiva del sueño a dosis de 2.5 a 10 mg /día. En Lûdenscheid (Alemania) se trató el dolor neuropático con una dosis diaria de dronabinol de 12.7 ± 2.9 mg. En Dusseldorf, (Alemania) se utilizó dronabinol en niños en espasticidad a dosis de 0.08 a 1.0 mg/kg/día. En NY se comparó el efecto del dronabinol y la marihuana en el tratamiento de la gastroparesia, demostrando que es más eficaz la marihuana inhalada. Conclusiones: Los cannabinoides (marihuana, dronabinol y nabilona) son muy útiles en el tratamiento de diferentes patologías, siendo el riesgo de crear adicción el que limita su uso.