XIV Congreso Internacional sobre Religi?n y Espiritualidad en la Sociedad

Resumen

La angustia, condición inevitable de la existencia, ha propiciado que la religión responda a ella para reducir sus efectos. Paradójicamente, la transmisión de la tradición religiosa no ha estado exenta de cierta instrumentalización de la angustia con fines propedéuticos, catequéticos, o incluso, como ejercicio de control de la conciencia. Entre los métodos desarrollados por la religión católica alguno de ellos instruía en el camino correcto por oposición apelando al terror de castigos futuros. Los Novisimos, elemento medieval que enseñaba acerca de lo que sucederá al final de la vida, estuvo presente en la Iglesia y en particular a través de la figura del diablo y del infierno. En el presente estudio nos aproximamos a la representación del infierno de Tadeo Escalante (s.XVIII-XIX) en la Iglesia de Huaro (Quispicanchis-Cusco-Perú) con el doble propósito de explorar lo que evoca en el observador, así como para subrayar particularidades que permitan verificar si habría en germen una teología propia y local. Al mismo tiempo, frente a esta representación nos hemos preguntado si, en el tiempo de dicha catequesis, era posible una visión alternativa de la escatología alrededor del infierno.