Resumen
El 19 de septiembre de 2017 se ha vuelto una fecha histórica para México, particularmente importante para el Estado de Morelos. Un sismo suscitó una catástrofe en el centro del país con consecuencias devastadoras. En vista de estos hechos resulta evidente el impacto psicosocial que este fenómeno desató en la subjetividad de los afectados y en la salud mental individual y colectiva. Ahora bien, en el trauma psíquico hay una interacción del afuera (comunidad) con lo interno (procesos psicológicos y afectivos) y viceversa. Así la perspectiva psicosocial señala la importancia de atender aquellas condiciones situadas más allá de la unicidad del individuo, buscando la colectividad. Para hacer frente al trauma y ante la incapacidad del estado mexicano el arte ha servido como herramienta comunitaria frente a la catástrofe. El arte es una fuente de encuentro, con sí mismo, con la historia, la cultura, el otro y otros; es también un reflejo y una construcción identitaria, tanto personal como colectiva, ya que conforma emociones, saberes y vivencias que recorren el pasado y el futuro de las sociedades. El arte, por lo tanto, refleja la infinita capacidad del hombre de asociarse con los demás, de compartir experiencias e intercambiar ideas y emociones. Diversos colectivos artísticos se conformaron luego de la contingencia para dar atención a damnificados y afectados durante y después de la contingencia, como respuesta ante la ineficiencia de las instituciones oficiales para hacer frente al percance.
Details
Presentation Type
Ponencia temática de un trabajo
Theme
Estudios Sociales y de la Comunidad
KEYWORDS
Desastre, Evento Natural, Trauma, Arte, Lazo Social
Digital Media
This presenter hasn’t added media.
Request media and follow this presentation.