XVIII Congreso Internacional del Arte en la Sociedad

Resumen

Se propone un ejercicio de analizar las obras pictóricas desde la perspectiva de lo que no se ve, de lo que se oculta o se emborrona premeditadamente. Para este fin, utilizaremos como ejemplo la obra del artista belga Léon Spilliaert (1881-1946), encuadrado dentro del Simbolismo de principios del siglo XX, pero con un lenguaje muy particular en el que la ausencia, el vacío y la soledad formaban parte tanto del componente estético como de la técnica, de la temática y del significado intrínseco de su obra. A través del análisis de su trabajo se pretende hacer hincapié en la importancia de tener en cuenta que, en la obra de artistas de determinadas corrientes contemporáneas, lo que no se ve a veces es tan relevante como lo que se muestra de forma evidente. Los espacios vacíos, las técnicas borrosas, las perspectivas o encuadres que ocultan lo que la mente completa, a menudo encierran un mensaje tan interesante como el resto de componentes visibles en una obra pictórica; un mensaje capaz de hablarnos tanto del contexto general en el que fue realizada, como de las influencias, anhelos o inquietudes más personales del artista que la ejecutó.